DANZA DE LA MUERTE
La Danza de la Muerte sería la primera obra conservada en sentido teatral. Consiste en una obra de tema extendido por toda Europa el poder igualador y terrible de la muerte. En la Danza, el personaje de la Muerte va llamando a todos aquellos que representan una categoría social, desde el Papa hasta los más humildes, y les va invitando a danzar mientras se lamentan por los pecados cometidos o por los placeres perdidos. La muerte, inmisericorde, les recrimina su vida. La presencia progresiva de personajes intensificaría el efecto dramático.
Veamos un fragmento de la misma:
Dice la muerte
A la dança mortal venit los nascidos
que en el mundo soes de cualquiera estado:
el que non quisiere fuerça e amidos
fazerle he venir my tose parado;
pues que ya el fraire vos ha pedricado
que todos vayaes a faser penitencia,
el que non quisiere poner diligencia,
por mí non puede ser más esperado.
Primeramente llama a su dança a dos donzellas
A esta dança traxe de presente
estas dos donzellas que vedes fermosas:
ellas vinieron de muy mala mente
oír mis canciones, que son dolorosas;
mas non les valdrán flores e rosas
nin las composturas que poner solía:
de mí si pudiesen partirse querrían,
mas non puede ser, que son mis esposas.
A estas e a todos por las apostura
daré fealdad, la vida partida,
e desnudedad por las vestiduras,
por siempre jamás muy triste aborrida
e por los palacios daré por medida
sepulcros escuros de dentro fedientes,
e por los manjares gusanos royentes
que coman de dentro su carne podrida.
E porque el santo padre es muy alto señor,
que en todo el mundo non hay su par,
d’esta mi dança será guiador:
desnude su capa, comience a sotar;
non es ya tiempo de perdones dar,
nin de celebrar en grande aparato,
que yo le deré daré en breve mal rato:
dançad, padre santo, sin más detardar.
Dice el padre santo
¡Ay de mí, triste, qué cosa tan fuerte,
aquí que tractaba tan grand perlazía,
haber de pasar agora la Muerte
e non me valer lo que dar solía!
Beneficios, e honras e grand señoría
tove en el mundo, pensando vevir;
pues de sí, Muerte, non puedo fuir,
valme, Iesucristo, e tú, Virgen María.
Durante la Edad Media se representaban y bailaban por toda Europa las danzas de la muerte. Aún hoy perviven este tipo de representaciones. En Verges, Gerona, cada jueves santo se sigue representando desde la época medieval:
La Danza de la Muerte from Marco Zouvek on Vimeo.